No siempre el lugar donde vives es tu hogar.
Yo aprendí eso alguna vez, pues donde yo vivía, claro me gustaba porque nunca me había mudado, pero hubo una vez en la que tuvimos que irnos mi familia y yo muy lejos a vivir de nuestra casa.
Tenía miedo de que no me aceptaran al principio, pero, me fui acostumbrando a todo aquello que era en un principio raro para mi, y acostumbrarme fue lo más fácil, porque aunque yo no era de ese lugar, es decir, yo no naci ahi, las personas me trataban bien, y entonces comencé a tomar confianza a los demás y eso me hacía sentir muy bien... Pero tiempo después mis padres decidieron regresar, y bueno, yo no me opuse a su palabra, asi que regrese al lugar donde había vivido la mayor parte de mi vida... pero, al regresar, comencé a sentir un vacío muy grande y fue ahí cuando me di cuenta que mi "hogar" no estaba en esa construcción, sino que estaba en mi corazón y que en cualquier lugar donde yo estuviera con mi familia siempre yo pertenecería....
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